SI TE PARECE SIGO HABLANDO DE BODAS

HABLANDO DE BODAS

MACARENA & ALBERTO

Sonreír, observar, mirar con cariño, abrazar, besar, emocionarse, llorar y reír a carcajadas.

“Contigo todo es de 10”

Un sol radiante inauguraba el sábado día 19 de Mayo en Pozoblanco y su luz entraba por la ventana de la habitación donde Maca escribía unas palabras a cada una de sus nueve Damas de Honor, sus amigas del alma, entre las que, afortunadamente me encuentro yo.

Después de todas las gestiones que conlleva la organización de una boda, Macarena tal vez ya un poco más relajada mientras que la peinan, sonreía mientras decía: “Ya estoy aquí ¡Que me caso!” y se le iluminaba la mirada.

Y es que, a mi amiga Maca muy pocas veces la he visto seria. Es de esas personas sonrientes, con esa gracia y salero andaluz que cautiva a cualquiera que esté a su alrededor.

De Alberto, sólo puedo hablar bonito. Recuerdo cuando mi amiga me dijo que había conocido a un chico guapísimo en un restaurante.  No había momento que no hablara de él… Me decía: “Cala, es que me gusta de verdad. Lo tienes que conocer” (con acento andaluz).

Entonces le conocí y a partir de ese día, creo que ya empezó nuestra amistad. De esas que, a pesar de la distancia, cuando te vuelves a ver es como si el tiempo se hubiera detenido.

El tándem que forman Macarena y Alberto es brutal. Y lo mejor de todo, es que son mis amigos.

Macarena y Alberto se dieron el “Sí, Quiero” en la Capilla de Nuestro Padre Jesús Nazareno en Pozoblanco (Córdoba) el pueblo de ella.

En la Ceremonia, se leyeron varias lecturas pero, desde aquí me atrevo a decir que la más emotiva fue la de Félix, el hermano de Maca, por la relación tan estrecha que tienen.

A la salida de la iglesia, ya como marido y mujer, fueron sorprendidos por un grupo de amigos, con guitarra en mano y entonando su canción favorita “Todos los besos” de Los Rebujitos, que casualmente fue con este tema con el que Alberto le pidió matrimonio.

Estar en ese momento y presenciar las emociones de la pareja escuchando a sus amigos cantando flamenco, fue realmente especial. “Piel de gallina”.

Y era el momento de salir de la Iglesia… ¡Lluvia de pétalos y arroz! y momentos como el de esta foto.

¡Viva los novios! 

Maca quiso cumplir la frase convertida ya en un código obligado para toda novia:

Algo nuevo: Compró los zapatos, los pendientes y su impecable vestido

Para su vestido confió en Sara García, quien está detrás de la marca Impúribus.

Algo azul: Magdalena, una de sus Damas de Honor le regaló una liga

Algo prestado y viejo: Utilizó en la Ceremonia el pañuelo de boda de su madre

El ramo de Maca fue de tipo silvestre con pinceladas dulces y en tonos amarillo, rosa empolvado y verde.

Alberto escogió un elegante chaqué inglés clásico de verano, de lana fría en negro, chaleco cruzado en color gris y corbata burdeos. Para los zapatos confió en la firma española Andrea Chenier. ¡Iba guapísimo!

La celebración tuvo lugar en un típico Cortijo Andaluz “El Cortijo de Navalobos” situado en Villanueva de Córdoba (Valle de Los Pedroches), en mitad del campo, con un patio empedrado en el centro, grandes jardines, una pequeña casita donde se celebró el baile y un salón diáfano para el banquete.

Antes de terminar esta publicación, quiero y debo agradecer a Macarena, el protagonismo que nos brindó a cada una de sus Damas de Honor en el proceso de organización y celebración de su boda así como también, el cariño con el que nos cuidó toda su familia.

Y desde mi espacio y siguiendo hablando de bodas, digo con total convencimiento que el Sí, Quiero de Alberto y Maca, fue uno de los días más felices de mi vida.

“Cada uno muestra lo que es en los amigos que tiene”

(Baltasar Gracián)

¡Muy pronto te cuento la tercera y última parte de este BODÓN!

Créditos:

Fotografía: Gloria Byler

Vestido de novia: Impúribus

Ramo novia y decoración floral: Moisés de Ego Arte y Diseño floral

Peluquería y maquilladora: Elia y Ana de Farmarosa

Menú